martes, 4 de agosto de 2015

¿Eso es todo lo que tienes?

Veo a una mujer en medio del campo de batalla llevando una lanza.

Es de estatura media,pelo castaño,con una trenza que termina en color verde oscuro,con ropajes marrones,lleva un par de cráneos atados con cuerdas a la cintura y consigo discernir un cinto completo de cuchillos al hombro que le pasa por la izquierda. Lleva un peto de cuero,aunque parece que por dentro lleva una cota de malla.

Puedo observarla lo suficiente como para ver como atraviesa a uno de los soldados enemigos con su lanza,la cual parece ser de corto tamaño para utilizarla como una especie de espada. Le hace un corte por debajo del brazo,justo para hacerle una finta y mutilarselo.Acto seguido,permanece en el centro de un circulo de hombres armados y pertrechados dispuestos a acabar con ella.

Es maravillosa.

No puedo dejar de observarla. Es increíble como se mueve,como lucha,y como sigue destruyendo a todo aquel que intenta arrebatarle la victoria. Es imbatible.

Mi corazón late cada vez mas rápido mientras veo que la están rodeando y mis armas están sedientas. No importa que este aquí,no importa con quien este. Necesita ayuda.

Veo a la mujer luchar mientras mi armadura tintinea al ritmo de mis pasos,apremiandome para ayudarla a tiempo. Me cuesta cada vez mas correr por el peso de la armadura,pero ya estoy llegando,justo a tiempo para verla encargarse de otro mas.

Ha esquivado un mandoble de uno de los caballeros,ha girado sobre el y le ha atravesado la espalda y el pecho con su arma en una obra de destrucción perfecta,con un ritmo que ni los mismísimos caballeros del mejor rey podrían haberlo hecho.

En cuanto pongo el pie a menos de cinco pasos se gira y me observa. No la conozco,ni ella a mi,pero sabe a lo que vengo.Me guiña un ojo,sonríe,y nos colocamos espalda con espalda,utilizando mi escudo para proteger el lado izquierdo y parte de su lado derecho.

El resto del ejercito de hombres nos observan mientras nos desplazamos en circulo para estar atentos a cada movimiento que puedan realizar el resto de hombres.

-La Gloria para los dos,imagino.Magnus,a tu servicio.

Ella me observo,sonrió y dijo: Albion,¿tienes calor?

Apenas me dio tiempo a agacharme al ver como unas chispas brotaban de sus dedos y arrasaban a los dos que tenia enfrente a base de una llama de fuego que brotaba de sus manos,mientras veía como gritaban y su carne parecía desgarrarse con cada llama que llegaba a cada rincón de su cuerpo.

"Increíble".Tuve que pensar rápido y vi como uno de los que se posicionaba tras Albion corría hacia ella espada en mano y tuve que correr lo suficiente para poder interceptarlo.Cuando vio que ya estaba entre el y la chica,vino a por mi.Pare su espada con el escudo,desviando su arma y dejándolo sin defensa,para poder clavarle mi espada en su pecho.Lo aparte de un golpe con el escudo y volví la vista para ver los que quedaban.

En cuanto ella dejó de lanzar aquel infierno,volvió a recoger la lanza-espada y volvió a colocarse tras de mi.

-Ese truco ha sido bueno,¿algo mas que deba saber?-el caso es que por alguna razón,me hacia mucha gracia lo que acababa de hacer y no podía dejar de reír.

Su cara se torno seria cuando empuño su arma frente a ella,cogiéndola con una mano,alzándola hasta poner la punta casi en su frente,cerrando y abriendo los ojos,sin dejar de observar a los tres soldados que tenia frente a ella.

Delante de mi también tenia unos cuatro soldados listos para venir al mismo tiempo.En cuanto el primero de ellos empezó a marchar sobre mi ya tenia el escudo listo para otra refriega.Utilice mi arma contra la suya para dejarlo indefenso,cuando tras la parada,observo que la lanza-espada de Albion le pasa entre las cejas.

Por puro instinto,me giro sobre mi mismo para proteger a Albion por detrás,justo a tiempo para parar con el escudo el golpe de uno de los tres soldados,momento que aprovecho,le corto la parte trasera de la rodilla y cae al suelo,gritando.Pongo fin a su dolor.

Estoy cansado de estar a la defensiva.Albion me lanza un silbido,la observo y veo que ella también se ha cansado. Es hora de atacar.

Coloco el escudo a la altura del pecho,giro un par de veces mi hoja sobre si misma y cargo contra los dos que tengo justo delante. Giro sobre mi mismo y efectúo un corte sobre el cuello del primero y le lanzo un golpe con el escudo al siguiente,el cual se lleva directamente las manos a la nariz y la cara. Le empujo de nuevo con el escudo y lo atravieso. Y ahí sigue ella.

Tras de mi,esta ocupándose de los tres que quedaban. Se abalanza sobre el primero,golpea el arma del contrario para desviarlo,lo agarra de la muñeca y lo atraviesa con una facilidad casi mística.

Viendo su aciago futuro,los otros hombres se lanza a por ella,pero ni se inmuta. Esquiva la hoja del primer soldado agachándose,pero de una forma natural,como si cayera sobre aire invisible,tan suave que no es real. Utiliza el pomo del arma para golpear la cabeza del otro soldado antes de que le de tiempo de reaccionar,le corta el cuello y le da tiempo de ponerse en la espalda del anterior hombre para cortarle los tendones de las piernas,hacer que caiga y arremeter con su arma sobre su cabeza.

No pude mas que observarla y decirle,con una sonrisa: "Eres increíble"

Ella sonrió,y supe,desde ese momento,que tenia que quedarme con ella.




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